Quizá ya se haya dado cuenta de que el contenido que hemos distribuido en los últimos días por los distintos canales de Chrono24 está muy centrado en un público específico: las mujeres.
Con un porcentaje de participación en la plataforma de casi el 25 %, está claro que las mujeres no son mayoría, pero existe un interés considerable. Y esto no se deduce únicamente de las contribuciones que hemos publicado en los últimos días, sino también de nuestras cifras de usuarios. Además de proporcionar información sobre las preferencias de las usuarias los relojes, con los artículos publicados tenemos dos objetivos: por un lado, generar conciencia sobre la diversidad existente en la comunidad relojera y, por otro, inspirar a aquellas mujeres a las que les gustaría iniciarse en este mundillo pero no saben exactamente por dónde empezar.
Así que, si todavía no ha compartido estas publicaciones de los últimos días con su novia, su hermana o su madre, este es un buen momento para hacerlo. Al fin y al cabo, como ocurre con muchas otras cosas de la vida, la alegría (en este caso, la de nuestra afición por los relojes) se duplica cuando se comparte.
En este breve y, por ahora, concluyente artículo nos gustaría dar a conocer los principales hechos que hemos constatado al echar un vistazo a nuestro conjunto de datos.
1. Las mujeres ocupan más del triple de la participación de mercado de Cartier que los hombres.
También hemos analizado la participación de mercado de las marcas más destacadas entre las usuarias de la plataforma en comparación con los usuarios masculinos. Según lo observado, las marcas de lujo y joyería como Chanel, Cartier, Chopard y Bulgari lideran la clasificación entre las mujeres. En contraposición, Zenith y Tudor son algunas de las marcas de relojes más consolidadas entre los hombres.
Como dato curioso (y porque es imposible no mencionar a esta marca), casi un tercio de los relojes comprados por mujeres son de Rolex, y más de la mitad del dinero gastado se invierte en relojes de este fabricante.
2. La probabilidad de que una mujer compre un reloj con un calibre de cuarzo es el doble que la de un hombre.
Más de la mitad de los relojes para damas anunciados en nuestra plataforma están impulsados por calibres de cuarzo, por lo que no es de sorprender que, en comparación, el público femenino compre más relojes de cuarzo que el masculino.
Curiosamente, los datos de compra reales presentan una diferencia: a pesar de la gran oferta de relojes de cuarzo, en el momento de la compra, las mujeres se deciden con mucha más frecuencia por ejemplares con movimientos automáticos.
Esto hace que nos cuestionemos si la oferta de productos realmente está orientada a las preferencias de las usuarias o si sus decisiones se ven influenciadas por consideraciones prácticas, como el tamaño de la caja.
3. Hay más del doble de probabilidades de que una mujer compre un reloj con una caja de un metal precioso que un hombre.
En la segunda mitad del siglo XX, el acero inoxidable se estableció como material dominante en la fabricación de relojes de lujo. Y, aunque esta prevalencia también coincide con las preferencias de los compradores tanto masculinos como femeninos en Chrono24, al echar un vistazo a los datos queda claro que los metales preciosos son el doble de populares entre las mujeres que entre los hombres.
Además de las preferencias en cuestión de material, ha salido a la luz un dato interesante respecto a la forma de caja preferida. Al parecer, las mujeres están más abiertas a relojes con cajas "poco tradicionales", es decir, rectangulares, cuadradas, etc.
4. Durante los últimos cinco años, la probabilidad de que las mujeres compren un reloj con un diámetro de caja de más de 40 mm ha aumentado en un 25 %.
Si alguna vez busca en Google "relojes de mujer" o "relojes femeninos", observará que, en la mayoría de los casos, se trata de relojes con cajas pequeñas. Y aunque seguramente muchas de nosotras preferimos llevar relojes de menor tamaño (mi Seiko Presage mide 34 mm, un diámetro que, personalmente, me gusta mucho), a partir de nuestros datos hemos constatado que, en los últimos cinco años, la popularidad de los relojes grandes (y con ello nos referimos a diámetros de 40 mm y más) ha aumentado entre las usuarias femeninas.
¿Señala esto un cambio de tendencia? Desde luego, indica que hay una convergencia de los gustos relojeros de hombres y mujeres.