Para mucha gente, los relojes de lujo son sinónimo de relojes suizos, lo cual es bastante comprensible. Durante más de 100 años, la república alpina ha mantenido una especie de monopolio en lo que a relojes de alta calidad se refiere. Patek Philippe, Rolex, Breitling, Omega… La lista de nombres célebres es interminable. Pero, por muy todopoderosa que pueda parecer la industria relojera suiza, el resto del mundo también tiene un gran número de marcas de relojes de primera clase que ofrecer. Así que vamos a llevarle en un pequeño viaje alrededor del mundo. Hemos seleccionado seis países y varias marcas relojeras con sede en ellos que no tienen nada que envidiar al dominio suizo.
Italia: entre la Marina y la moda
Comenzamos en el sur, en la bella Italia. Desde luego, aquí no faltan las marcas de lujo. Aunque Dolce & Gabbana, Gucci, Prada y Versace se sienten más a gusto en el negocio de la moda, en los últimos años han empezado a producir cada vez más relojes propios. Bulgari posee una historia de éxito particular. La marca se ha convertido en un auténtico fabricante de relojes y puede presumir de haber colaborado con el icono del diseño Gérald Genta. Desde hace años, Bulgari es una de las empresas que han batido récords en la incesante competición por los relojes más delgados, lo que demuestra que esta marca se toma en serio el negocio de la relojería.

Panerai es otro de los grandes nombres de Italia. Antes de que la marca se convirtiera en un símbolo de la virilidad italiana gracias a celebridades como Sylvester Stallone, la empresa abastecía en exclusiva a la Marina italiana desde la década de 1920. Con sus cajas sobredimensionadas en forma de cojín, hoy en día el Luminor y el Radiomir se consideran icónicos y son una buena elección para quien busque un reloj con una gran presencia en la muñeca. Por cierto, nuestro autor Donato Andrioli ha cubierto para usted las 5 mejores marcas de relojes italianas en su artículo.
Francia: alta costura y alta relojería

Con Cartier, Francia cuenta con uno de los grandes nombres de la alta relojería. La marca es responsable de clásicos como el Santos, el Tank, el Pasha y el Crash. Además, Cartier allanó casi en solitario el camino al reloj de pulsera a principios del siglo XX. Sin embargo, Francia también tiene toda una gama de marcas más jóvenes que ofrecer. Un ejemplo de ello es Bell & Ross, que se ha labrado un nombre con sus relojes-herramienta funcionales y resistentes. La prometedora micromarca Baltic, por otra parte, impresiona con sus relojes de vestir de alta calidad y diseño retro. Asimismo, Yema, que estuvo en el candelero en los años 50 y 60 con sus relojes de buceo y cronógrafos de carreras, ha retornado con éxito recientemente. También puede encontrar más información sobre estas marcas en el artículo de Tim «3 marcas francesas de relojes que debe conocer».
Reino Unido: Bremont Calling

En los siglos XVIII y XIX, Gran Bretaña todavía era una de las principales naciones relojeras, pero después se quedó rezagada rápidamente. Sin embargo, desde hace unos 25 años, la relojería está resurgiendo en las islas. Marcas como Bremont, Christopher Ward y Farer se han ganado una base de fieles seguidores en muy poco tiempo gracias a sus diseños únicos, su excelente acabado y sus precios moderados. Hay de todo: desde relojes de vestir clásicos hasta relojes de piloto y buceo, pasando por modelos con función de hora mundial o repetición de minutos.
Japón: la cuna del reloj de cuarzo

Dejamos Europa y volvemos ahora la vista al este, a Japón. La industria relojera japonesa ha tenido que lidiar durante mucho tiempo con el estigma de inundar el mercado con relojes de cuarzo baratos. Y, de hecho, fue la marca Seiko la que lanzó el primer reloj de pulsera de cuarzo del mundo, desencadenando la crisis del cuarzo de los años 70 y 80, tan devastadora para la industria relojera suiza. Sin embargo, a estas alturas ya debería haberse corrido la voz de que ciertos fabricantes, como Seiko, Orient y Citizen/Miyota, son serios productores de relojes de alta calidad. A diferencia de muchas marcas suizas, estas empresas son auténticas manufacturas que diseñan y fabrican ellas mismas todas las piezas de sus relojes. Seiko en particular ha demostrado una y otra vez su capacidad innovadora y ha desarrollado tecnologías completamente nuevas, como el calibre Spring Drive, que combina lo mejor de los movimientos mecánicos y de cuarzo. Además de las grandes marcas, Japón ofrece toda una gama de interesantes micromarcas y relojeros independientes. Algunos ejemplos son Minase, Hajime Asaoka y Masahiro Kikuno. Aquí hemos preparado para usted una visión general de la relojería japonesa.
EE. UU.: espíritu americano en el corazón

En su día, EE. UU. tuvo una próspera industria relojera. Varias marcas, como Waltham, Hamilton, Ball Watches y Bulova, fueron los buques insignia de la relojería estadounidense hasta mediados del siglo XX. Hoy en día, estas marcas ya no existen o hace tiempo que emigraron a Suiza. Sin embargo, al igual que en el Reino Unido, también se ha observado un renacimiento de la relojería en el país de las oportunidades. Además de la veterana marca Timex, cada vez son más los pequeños fabricantes que se están labrando un nombre, como Autodromo, J.N. Shapiro, Shinola y la Weiss Watch Company. Aquí también tenemos para usted un top 5 de las mejores marcas de relojes de Estados Unidos.
Alemania: Made in Germany

Para terminar, volvemos a Europa central, más concretamente a Alemania. En este país también ha habido una floreciente industria relojera desde hace unos 200 años. Uno de los principales centros relojeros es la región de la Selva Negra, que en su día se hizo famosa por sus relojes de cuco y que hoy alberga marcas como Junghans, Stowa y Laco. Igualmente conocida es la pequeña ciudad sajona de Glashütte. En 1845, Ferdinand Adolph Lange transformó este antiguo asentamiento minero en un centro de la relojería de lujo. Hoy en día, encontramos allí nombres tan ilustres comoA. Lange & Söhne, Glashütte Original y Nomos Glashütte. ¿Desea leer más al respecto? Entonces le recomendamos nuestro artículo sobre los principales fabricantes de relojes alemanes.