Relojes de leyenda: Omega Speedmaster Professional Moonwatch

En 1957, Omega introdujo tres nuevos relojes en el mercado: el Seamaster 300 (CK2913), el Railmaster (CK2914) y el Speedmaster (CK2915). Los tres relojes presentaban un diseño similar y todos pertenecían a la categoría de “reloj herramienta”: el Seamaster para el buceo, el Railmaster para el uso profesional (también era anti-magnético) y el Speedmaster para las carreras y otros usos deportivos.

Omega no pensaba involucrarse en el programa espacial ni superar los severos procesos de pruebas cuando desarrolló este modelo. El Speedmaster era “tan solo” un reloj cronógrafo, con el movimiento de calibre 321 basado en el Lemania, destinado a medir lapsos de tiempo. Este movimiento también se utilizó, con diferentes acabados, en relojes de Patek Philippe y Vacheron Constantin, por ejemplo.

En 1962, el Omega Speedmaster fue utilizado en el espacio por el astronauta de la NASA Walter Schirra durante la misión Mercury Sigma 7. Sin embargo, no fue hasta 1964 que la NASA decidió hacer un llamamiento para crear relojes cronógrafos destinados a sus astronautas de la misión Apolo. Cuando la NASA probó los relojes de cuatro marcas diferentes (Omega, Rolex, Longines-Wittnauer, Hamilton), solo tres marcas llegaron a sobrevivir a la primera fase de selección de controles de exactitud. Además de dichos controles, la NASA también realizó pruebas que incluyeron golpes severos (40G cada uno), temperaturas altas (93 grados centígrados) y bajas (-18 grados centígrados), así como cambios extremos de temperatura, pruebas de presión, pruebas de vibración, etc. El Omega Speedmaster los superó todos.

Estaba claro para el oficial responsable de compras de la NASA que este debería ser el reloj de elección durante las misiones de Apolo. En algún momento del proceso de selección, la marca estadounidense Bulova usó sus contactos en la Casa Blanca para introducir uno de sus modelos en las pruebas, después de que el Omega ya las hubiera pasado todas. ¡Pero el reloj que entregaron no tuvo ninguna oportunidad ni siquiera así!

En 1965 todos los resultados de las pruebas fueron procesados y la NASA comunicó que el Speedmaster se convertiría en el reloj oficial de todos los vuelos espaciales tripulados. La NASA incluso incluyó lo siguiente en su comunicado: “… los astronautas muestran una preferencia unánime por el cronógrafo Omega sobre las otras dos marcas debido a una mayor exactitud, fiabilidad, facilidad de lectura y facilidad de uso”. La palabra “Professional” se había grabado antes en algunas esferas del Speedmaster, pero a partir de ese momento, todos los relojes Omega Speedmaster han llevado esa etiqueta con orgullo.

En la famosa misión Apolo XI de 1969, cuando los primeros hombres pusieron pie sobre la Luna, los tres astronautas llevaban el Omega Speedmaster Professional en sus muñecas. Collins se quedó en la nave espacial con su Speedmaster referencia 145.012, mientras que Aldrin y Armstrong llevaban sus relojes Speedmaster 105.012. Básicamente eran los mismos relojes, con solo algunas diferencias ópticas menores. Armstrong se había quitado el reloj de la muñeca para usarlo en lugar del reloj de a bordo (Bulova) en el módulo lunar, que dejó de funcionar. El primer reloj usado en la Luna estaba por tanto en la muñeca de Edwin “Buzz” Aldrin, y fue el Omega Speedmaster Professional 105.012.

Los astronautas usaron el Speedmaster Professional con calibre 321 durante todo el programa Apolo. A pesar de que su sucesor llegó en 1969, el Speedmaster con calibre 861 basado en el Lemania (referencia 145.022) siguió utilizándose tal y como lo certificó la NASA.

El Omega Speedmaster era un producto civil, pero los astronautas le confiaron sus vidas durante su hazaña espacial. El Speedmaster Professional realmente salvó a toda la tripulación durante la misión Apollo 13, en 1970. La tripulación necesitó medir el tiempo de encendido de la propulsión durante exactamente 14 segundos, con el fin de entrar en la atmósfera en ángulo recto, de lo contrario hubieran sido incinerados por fricción con la atmósfera. Aunque, probablemente, cualquier reloj hubiera podido medir 14 segundos con precisión, ¡no todos los relojes hubieran sido capaces de sobrevivir al lanzamiento del cohete Apolo Saturn V en el primer lugar!

El Omega Speedmaster Professional “Moonwatch” es uno de los cronógrafos más buscados en la actualidad. También en Chrono24, la demanda de este reloj es increíblemente alta. El Omega Speedmaster Professional actual es muy similar al modelo de 1969, con el movimiento manual de calibre 861 basado en el Lemania. Aunque los modelos pre-1968 son muy solicitados por los coleccionistas, cualquiera de los modelos Speedmaster (Profesional) con movimiento manual resulta excepcional. Cada reloj es un pedazo de historia en su muñeca.

Además de ser el legendario Moonwatch y un hermoso reloj, es también un modelo muy asequible. La relación calidad precio es muy alta, incluso con los precios de hoy. Un Omega Speedmaster Professional nuevo tiene un precio de salida de poco menos de 4000 euros, pero usted puede conseguir un modelo de segunda mano por alrededor de la mitad de esa cantidad. El precio de los modelos vintage puede subir como un cohete Saturn V, sin embargo, dependiendo de la condición, la edad y la demanda entre los coleccionistas.

Hay un montón de modelos para elegir al comprar un Omega Speedmaster Professional. Asegúrese de llevar el conocimiento adecuado a la compra, si está buscando un modelo vintage o un modelo de edición limitada muy solicitado (como los modelos conmemorativos Apollo XI y Apollo XIII o el modelo “Snoopy Award”).

Recuerde que ninguna colección de relojes está completa sin un Speedmaster.