Enamorarse de un reloj no es tan diferente de enamorarse de una persona. Hay quien se centra en la apariencia, mientras que otros se preocupan por lo que está en el interior. En un mundo ideal, encontraríamos ambos aspectos atractivos. En el caso de los relojes, eso implica que tengan un diseño interesante combinado con excelencia técnica. Así como la atracción humana a menudo proviene de la cara, la belleza de un reloj generalmente deriva de su esfera. Sin embargo, ¿qué pasaría si pudiéramos quitar la esfera y mirar directamente al corazón del reloj? ¡Resulta que sí podemos! Muchas marcas crean los llamados relojes esqueleto. ¿Quiere eso decir que estos relojes renuncian a la belleza externa en favor del carácter interno? Vamos a averiguarlo.
En los últimos años, muchas grandes marcas suizas han comenzado a crear relojes esqueleto. Esto es en reacción a los consumidores, que han demostrado un creciente interés por observar la maestría artesanal que da vida a sus relojes mecánicos. Básicamente, un reloj esqueleto renuncia a la totalidad o a la mayor parte de su esfera, lo que revela el movimiento incorporado en el interior. Sin embargo, la verdadera esqueletización no solo implica retirar la esfera, sino también la reducción del movimiento a lo esencial. Estos movimientos a menudo se decoran con acabados y grabados intrincados. El resultado final es una obra de arte.
Orígenes elitistas
Los relojes esqueleto no son ninguna novedad. Podemos rastrear su historia hasta 1760, cuando el maestro relojero francés André Charles Caron decidió prescindir de una esfera para que sus clientes pudieran contemplar la excelencia de sus movimientos mecánicos. Además, descubrió que podía fabricar relojes de bolsillo aún más delgados si se prescindía de ciertos componentes innecesarios. La clientela de Caron era la élite parisina del siglo XVIII, por lo que, por tanto, sus relojes esqueleto fueron diseñados para un grupo muy exclusivo de clientes.
Reinventando el reloj esqueleto
Después de desaparecer durante casi 175 años, este tipo de relojes volvió a lanzarse de la mano de Audemars Piguet, que presentó su propio reloj esqueleto en 1934 y lo puso al alcance de un público mucho más amplio. Audemars Piguet vio el mismo potencial que Caron, pero en un contexto muy diferente. Los relojes de pulsera habían superado en popularidad a los relojes de bolsillo, por lo que Audemars Piguet tenía ahora una caja significativamente más pequeña con la que trabajar. Esto no disuadió a la gran empresa relojera suiza, que creó movimientos increíbles, tan hermosos como funcionales. El reloj esqueleto tuvo un moderado éxito en la primera mitad del siglo XX, y harían falta algunas décadas más para que causara verdadero revuelo.
Combatiendo la crisis del cuarzo
En los años setenta y ochenta, la industria relojera suiza estuvo al borde del colapso como resultado de la crisis del cuarzo. Las marcas de relojes suizos se vieron obligadas a justificar su uso de movimientos mecánicos, mucho menos precisos que sus homólogos a pilas, que además son más baratos. Para algunos, la respuesta fue crear relojes esqueleto que enfatizaran la maravilla técnica que es un reloj mecánico hecho a mano. Afortunadamente, funcionó, y marcas de alta gama como Audemars Piguet, Jaeger Le-Coultre, Patek Philippe, y Vacheron Constantin producen este tipo de relojes desde entonces.
El reloj esqueleto como señal de identidad
Hoy en día, hay varias marcas que están creando impresionantes relojes esqueleto, incluidos Cartier, Bvlgari y Audemars Piguet. Sin embargo, una firma que realmente está llevando la esqueletización al extremo y abrazando realmente este tipo de relojes como su seña de identidad es Richard Mille. Esta empresa se basa en una filosofía de «ingeniería extrema», lo que conlleva utilizar materiales de última generación para fabricar los relojes más livianos posibles. Por eso también sus relojes carecen de esferas tradicionales, un rasgo que ha llegado a definir la marca.
Dicho esto, Richard Mille no es el único pionero en lo que respecta a los relojes esqueleto modernos. Otras marcas de la alta relojería como Roger Dubuis, HYT y Urwerk también han renunciado a las esferas convencionales en favor de relojes más livianos que ponen la excelencia técnica en primer plano. En realidad, esa es la característica fundamental de los relojes esqueleto. En lugar de mostrar simplemente un movimiento básico, estos fabricantes trabajan incansablemente para crear diseños completamente nuevos y llevar la relojería convencional a sus límites.
Obras de arte esqueletizadas
Hemos seleccionado tres relojes que demuestran el arte moderno de la esqueletización.
Cartier Santos Skeleton ADLC Noctambule
El Cartier Santos es un ícono indiscutible de la industria relojera. En el SIHH 2019, Cartier sorprendió a todos con el Cartier Santos De Cartier Skeleton ADLC Noctambule. Si bien los modelos esqueleto de Santos normalmente no aportan nada de especial, esta edición Noctambule sí consigue avanzar en muchos aspectos. Su caja está completamente recubierta de ADLC negro (carbono amorfo similar al diamante), y las manecillas y los índices horarios están rellenos de SuperLuminova. El cristal de zafiro en la parte delantera y trasera muestra el movimiento esqueletizado desde arriba y desde abajo. Así pues, lo que parece un reloj discreto durante el día se transforma en un reloj mágicamente brillante en la oscuridad. Esto no hace más que demostrar la naturaleza atemporal de la línea Santos.
Audemars Piguet Royal Oak Concept Tourbillon cronógrafo esqueletizado automático
En esta lista, no podemos olvidarnos de Audemars Piguet, ya que la marca es responsable de crear algunos de los relojes esqueleto más importantes de todos los tiempos. Los modelos Royal Oak Concept combinan tecnología y materiales de vanguardia con diseños fantásticos para crear verdaderas obras de arte. El Royal Oak Concept Tourbillon cronógrafo esqueletizado automático presenta una caja de titanio pulida con arena, piezas de cerámica negra y una corona atornillada. La parte delantera y trasera están protegidas por el cristal de zafiro, permitiendo admirar la cadencia de este exquisito movimiento. Gracias a sus materiales, este reloj es increíblemente ligero. Sin embargo, el movimiento es la verdadera estrella del espectáculo y demuestra la maestría artesanal de Audemars Piguet.
Bulgari Octo Finissimo Skeleton Ceramic
El Bvlgari Octo Finissimo ha obtenido un gran éxito desde su presentación en 2014. Posteriormente, Bvlgari ha introducido regularmente versiones que han ido cosechando diferentes títulos relacionados con su minúsculo tamaño: movimiento tourbillon más delgado, reloj automático más delgado, repetidor de minutos más delgado y cronógrafo más delgado. En Baselworld 2019, anunciaron el Bvlgari Octo Finissimo Skeleton Ceramic. Este es el primer Octo Finissimo elaborado de cerámica ligera. También es el primer reloj de esta colección que presenta un movimiento esqueletizado. El reloj subraya el poder del diseño del Octo Finissimo y la increíble ambición de Bvlgari.
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