De Stella Kirchner
¿Alguna vez ha pensado en comprar un Rødex Daitona por 3500 $ (unos 3200 €), o es usted más bien de los que se pregunta cómo se han podido colar tales errores tipográficos en la revista de Chrono24? Quizá le interese saber dónde puede conseguir un Rolex Daytona por tan poco dinero. Pues bien, en realidad, detrás de este nombre no se esconde ni un fallo de ortografía ni una ganga, sino un NFT de un reloj digital en la plataforma Open Sea.
Es posible que ya haya leído en múltiples ocasiones sobre los NFT y sus fuertes fluctuaciones de precio. Probablemente sea consciente de que los NFT son cada vez más populares cuando se trata de cuestiones de seguridad y de representación de derechos. ¿Sabía, por ejemplo, que incluso algunas marcas de relojes bien establecidas, como Breitling o Bulgari, están apostando por los NFT para sus relojes? La revista de Chrono24 le explica cómo funcionan a nivel técnico y por qué es posible que en el futuro casi todos los usuarios de relojes posean también un NFT.
NFT: ¿el estuche y los papeles del futuro?
Xavier de Roquemaurel, director general de la marca de relojes Czapek, lo tiene claro: «Para nuestros relojes siempre hemos utilizado papeles con un hermoso diseño y firmados a mano. Pero ahora nos encontramos en la era digital, por lo que también necesitamos un certificado digital». La realidad es que, aun en el año 2022, los relojes con estuche y papeles suelen alcanzar precios más elevados que los ejemplares sin un certificado material sobre el origen del reloj. Esto se debe, en parte, a la información que contienen, así como a la confianza que generan en el comprador dichos papeles y el estuche original. Y es precisamente esta información sobre la propiedad y el precio de compra la que está incluida en los NFT. Pero ¿en qué se distinguen los NFT de los certificados convencionales, y hasta qué punto son seguros?
«NFT es la abreviatura inglesa de ‘non-fungible token’, es decir, token no fungible. Fungibles (intercambiables) son, por ejemplo, los billetes de banco. Si usted me diese diez euros, podría devolverle un billete diferente, y el valor sería el mismo. Así pues, no fungibles son los objetos únicos que no se pueden sustituir por artículos equivalentes», explica Mathew Chittazhathu, director general de la empresa tecnológica suiza Adresta y, más concretamente, el hombre que, junto con su equipo, ha creado los NFT de los relojes de Czapek. Un NFT sería comparable con un objeto único, «desde obras de arte hasta un autógrafo de Michael Jordan, la diferencia entre tales objetos y los NFT es únicamente que los NFT no son físicos, sino que se almacenan digitalmente en la cadena de bloques», explica Chittazhathu. Así que se trata de artículos únicos digitales.
La seguridad de los NFT de relojes: cadena de bloques en lugar de caja fuerte
¿Pero por qué se necesita una cadena de bloques para guardar de forma digital la información sobre el propietario de un reloj? Una cadena de bloques o blockchain es el lugar de almacenamiento de los tókenes no fungibles. Se caracteriza por el hecho de que los datos no se guardan en un servidor, sino que «se almacenan y verifican en una red de ordenadores y en unidades: los bloques», indica el empresario. Es posible que ya conozca este término del ámbito de las criptodivisas, «pero la cadena de bloques ofrece muchos más casos de uso que las criptomonedas», afirma con entusiasmo Mathew Chittazhathu. No obstante, estas dos aplicaciones, divisas y certificados, presentan varias similitudes:
- Inmutabilidad de las transacciones: nadie puede alegar falsamente ser el dueño del dinero o del NFT (del reloj).
- Seguimiento exhaustivo de las transacciones: cada transacción se puede observar posteriormente y reconocer mediante un identificador personal, también denominado «key» (clave). Así no hay ninguna duda sobre quiénes son el autor y el comprador.
- Protección contra falsificaciones: los datos de la cadena de bloques no pueden duplicarse, por lo que son únicos y a prueba de falsificaciones.
Y precisamente esta protección contra las falsificaciones y trazabilidad es algo que muchos compradores de relojes desean. «A un cliente de Czapek le robaron un reloj en cuya esfera estaban grabados los nombres de sus hijos», relata el director de la casa Czapek, Xavier de Roquemaurel. «Entonces vio que ese mismo reloj se estaba anunciando en Chrono24 y, junto con el director de Chrono24, Tim Stracke, pudimos atrapar al ladrón y devolverle el reloj al cliente. Pero esta situación fue precisamente la que me mostró que necesitamos otro tipo de certificado». Si ese reloj se hubiera vendido con un NFT, con ese documento el cliente podría haber demostrado con un solo clic que era el propietario legítimo del reloj. «La seguridad de los clientes no debe depender de la buena voluntad de un empresario», afirma con firmeza de Roquemaurel. Ya se han creado y vendido varios cientos de NFT junto a los relojes correspondientes. «Y cada vez más gente los pide», asevera el directivo.
NFT de relojes: ¿la solución para todo?
Al leer este artículo, quizá se esté preguntando cuáles son las limitaciones de los NFT. «Como cualquier otra tecnología, por supuesto, la cadena de bloques tampoco es perfecta», admite el empresario Mathew Chittazhathu. «El complejo proceso de verificación de las transacciones requiere mucha energía, lo que tiene consecuencias negativas para el medio ambiente», explica. Además, hay que tener en cuenta que «los NFT representan un instante en el tiempo». Más concretamente, representan el momento en el que se crean. «Puede ocurrir, por ejemplo, que se añadan piezas de recambio a un reloj sin que esta alteración quede registrada en el NFT», concede Chittazhathu. En caso de que el NFT y el reloj se vendan por separado, la relevancia del certificado también se reduce. Sin embargo, la decisión de qué va a pasar con el reloj y el NFT siempre está en manos de su dueño, de la misma forma que, en la actualidad, cualquiera tiene la posibilidad de vender el estuche y los papeles por separado. «Como marca de relojes, nos gustaría facilitar a nuestros clientes los mejores certificados posibles para sus relojes», subraya Xavier de Roquemaurel, el director general de Czapek.
¿Se van a volver más caros aún los relojes de lujo debido a los NFT?
Otra empresa que parece ver las cosas de manera similar a Czapek es la casa de subastas Sotheby’s, que a principios de año subastó los diseños originales del Audemars Piguet Royal Oak de Gérald Genta con NFT incluido. Un orgulloso coleccionista desembolsó más de 550 000 € para hacerse con ellos. ¿Cree que ha influido en ello el NFT? La marca de joyas y relojes Bvlgari también ha aprovechado la creciente popularidad de los NFT para aplicar esta tecnología de forma más artística aún. Estamos hablando, por supuesto, del nuevo Bulgari Octo Finissimo Ultra con su distintivo código QR en plena esfera. Rara vez se han combinado tan estrechamente el diseño y lo digital en el mundo de los relojes. Pero la marca también pide un alto precio por dicho elemento: este increíble reloj, limitado a diez ejemplares, cuesta 400 000 €. El hecho de que Bulgari le haya arrebatado el puesto a Piaget por el reloj más plano jamás creado casi parece quedar en segundo plano. A modo de referencia, un Bulgari Octo Finissimo usado y sin NFT se puede adquirir por una media de 10 000 € en Chrono24.
Ante ejemplos como este, parece justificado el miedo a que los NFT de relojes disparen aún más los precios en un mercado con tendencia alcista. «En el futuro, es probable que los NFT también se revendan de manera independiente a los relojes físicos», intuye el empresario de NFT Chittazhathu. Así que el NFT también posee un valor propio, incluso sin su contraparte física. «Como bienes digitales, estos NFT de relojes también pueden ser compartibles, de manera que varias personas los puedan poseer conjuntamente».
Lo mismo se puede observar con las pruebas de autenticidad «físicas», como los estuches de relojes conocidos. Para hacerse con un estuche de Rolex con instrucciones, por ejemplo, los aficionados deben pagar varios cientos de euros en Chrono24. «En el caso de los NFT, no debemos olvidar que las modas siempre traen consigo fuertes fluctuaciones de valor. Así que no se puede garantizar en absoluto que los NFT de relojes vayan a aumentar de valor», señala Mathew Chittazhathu.
¿Van a quedarse obsoletos el estuche y los papeles?
«En algún momento, es posible que sea normal poseer un equivalente digital de un reloj de lujo», opina Mathew Chittazhathu. Esto seguramente reduzca las fluctuaciones de precios. De Roquemaurel también comparte esta opinión, pero destaca la importancia de los certificados físicos: «Los relojes están ligados a las tradiciones y también a lo material. Así que, desde luego, no vamos a sustituir los papeles, sino complementarlos con un NFT», aclara el director general de Czapek. Por tanto, cada comprador tendrá la opción de utilizar su NFT o no.
